Todos alguna vez pasamos por la incómoda situación de mojar la cama de pequeños y la verdad no fue para nada divertido. Muchos niños suelen pasar por esto, incluso, hasta después de los seis años; es muy raro que se deba por problemas graves, de hecho, es muy común durante esta etapa. Lo mejor que podemos hacer es procura que los niños no sufran o se agobien demasiado, debemos lograr que puedan descansar lo suficiente, sin preocuparse, pues de no ser así su rendimiento cognitivo será negativo en su día a día.
Antes de comenzar haremos una breve contextualización acerca de este tema. A este hecho, se le conoce clínicamente, como: enuresis nocturna o incontinencia nocturna. Tiende a ser hereditaria, sin embargo, se puede dar por cambios bruscos en la vida de los chiquitos. Nuestro deber cómo padres es ayudar a que nuestro pequeño encuentre el problema y pueda solucionarlo; con tacto y cariño esto será tarea fácil.
*Los niños toman control de su vejiga a la edad de los 5 años, es por eso que es algo preocupante para los padres que los peques mojen su cama en una edad un poco mayor.
Razones por las que el pequeño moja la cama
Generalmente es porque le da pereza ir al baño por la noche o, simplemente, lo hace a propósito. Cómo se menciono anteriormente, tiende a ser algo hereditario. No olvides que existen otras razones que contribuyen con este suceso como:
- Retraso en el desarrollo de la vejiga
- Alteración del sueño
- Estreñimiento
- Ansiedad
- Emociones externas que estén afectado al pequeño
- Infección urinaría
- Vejiga pequeña
- Situaciones de estrés (esta situación puede ser la más común pues se da con la llegada de un nuevo miembro a la familia, divorcio de los padres, fallecimiento de alguien cercano o, incluso, mudarse).
A continuación te daré algunos concejos que podrás poner en marcha para evitar que tu pequeño moje la cama, no olvides que esta fase se supera con paciencia y tiempo.
Consejos
Antes de dormir evita darle bebidas en exceso. A la hora de la cena, intenta, no prepara alimentos o bebidas liquidas. Justo antes de ir a la cama acompaña al niño al baño para que haga el último del día.
Descarta enfermedades o problemas de salud que estén asociadas con este tema. Consúltale a tu pediatra por lo que están pasando para que te ayude con una mirada médica; saldrás de dudas y podrás descartar un problema más.
Paciencia y no desesperase son la clave para estas situaciones. No hagas de esto un gran problema; no te preocupes más de la cuenta, esto suele superase sin más. Evita que el chiquito perciba irritación por tu parte al tener estos percances.
Protege el colchón. Mientras que están en el proceso de superación procura conseguir un plástico para el colchón así será mucho más fácil a la hora de limpiar y el colchón no sufrirá daño como: mal olor, manchas e higiene.
Déjale en su mesita de noche una pijama extra así él o ella se podrán cambiar sin ningún problema la ropa mojada . Esto ayudará a que autogestiones el problema y busquen un solución.
No lo castigues, ofrécele tu apoyo. La solución no es ridiculizarlo en frente de sus amigos o la familia; no le bajes su autoestima con comentarios hirientes.
Ponlo a limpiar. Con tu ayuda limpien el colchón y laven las sabanas, la idea no es humillarlo sino hacerlo caer en cuenta que debe levantarse en las noches e ir al baño.
Puedes incluso buscar remedios caseros con los que el niño podrá evitar mojar la cama.
Espero que estos consejos te sirvan y puedas hacer de esta situación una mucho más llevadera. Recuerda que es cuestión de tiempo y paciencia, compresión y apoyo. Felicítalo cuando haya pasado una noche sin hacerlo o una semana. Poco a poco todo quedara en el pasado. Es muy normal en el crecimiento de los niños así que no lo conviertas en un problema o algo traumático.
Si ya pasaste por esto, coméntanos como hiciste para solucionarlo y cuál fue el mejor consejo para sobrellevar la situación de la mejor manera.
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